Apoyar a todos los municipios del país para el desarrollo de planes comunales de seguridad más efectivos y eficientes. Este es el objetivo que busca la nueva metodología diseñada por el Departamento de Evaluación de Políticas Públicas de la Subsecretaría de Prevención del Delito y que se implementará como piloto en diez comunas del país.
La principal novedad de este modelo es que apunta determinar problemas acotados y específicos que afectan a las comunas, a partir de un análisis de datos y un trabajo en conjunto con los municipios. Así, busca generar objetivos claros a fin de que el plan comunal de seguridad contemple acciones concretas para cada problemática.
De igual manera, esta metodología pretende facilitar la coordinación con las metas trazadas en el Plan Regional de Seguridad Pública, así como con las estrategias que llevan a cabo las policías y el Ministerio Público en dichos territorios.
Para seleccionar las comunas donde se iniciará este piloto se consideró que estas tuvieran diferentes problemas de seguridad, su índice de gestión municipal, si contaban con un plan comunal previo y sus niveles de eficiencia en la gestión de proyectos financiados por la Subsecretaría.
¿Cómo funciona la nueva metodología?
En primer lugar, el Departamento de Evaluación de Políticas Públicas entrega a cada municipio una propuesta de prediseño del plan comunal, que identifica un grupo de delitos prioritarios y una serie de componentes para su abordaje.
Una vez recibida la propuesta, los equipos municipales de seguridad pueden modificarla o complementarla, añadir factores de riesgo o agregar nuevos problemas relevantes en el territorio, tales como delitos poco denunciados o situaciones que generen altos índices de temor en la comunidad.
Los municipios tendrán un mes para desarrollar el plan comunal de seguridad pública a partir de la propuesta. Luego, en un lapso de dos semanas, recibirán nuevas recomendaciones, las que podrán ser integradas a la estrategia.
Plan comunal para Talcahuano
Una de las primeras comunas que comenzaron a trabajar en esta nueva metodología fue Talcahuano en la Región del Biobío. En este caso, la propuesta enviada por el Departamento de Evaluación de Políticas Públicas contempla tres delitos priorizados: robo con violencia e intimidación, violencia intrafamiliar y abusos sexuales. Para cada uno de estos se definieron además diversos factores de riesgo y componentes con acciones concretas que permitan enfrentar estos problemas.
Asimismo, se determinó un problema alternativo, que son los robos e incivilidades que ocurren el sector centro de la comuna. Entre los principales factores que se determinaron como causa de esta situación se encuentran poca presencia policial, sitios eriazos y sectores poco iluminados, el abandono de espacios públicos, etc. Por lo mismo, se plantearon componentes como un reforzamiento del patrullaje preventivo, le ejecución de un sistema de televigilancia, un plan comunicacional de autocuidado, además de otras medidas.
Desde Talcahuano, durante una reunión por Zoom que sostuvieron con el DEPP, agradecieron la propuesta, puesto que, si bien algunos de estos problemas eran conocidos por el equipo municipal, otros no contaban actualmente con una adecuada oferta programática desde el municipio. Finalmente, se comprometieron a analizar el plan en profundidad y trabajar posibles mejoras desde lo local.
